sábado, 8 de agosto de 2015

TORTURA Y ARTE

Bien, hoy me decido a hablar de un tema que me tiene indignada desde que tengo uso de razón, a pesar de que me he criado en un ambiente donde esta práctica se considera tradición y se ve como algo completamente natural en mi país.
Por favor, querido lector, te voy a pedir con toda educación que si eres taurino o simplemente te mantienes neutral en el tema pero has decidido considerarlo como cultura, y quieres contraargumentar, adelante. Te aviso que como vea una mínima obscenidad, ni me molestaré en contestar y el comentario será eliminado ipso facto.

Esta práctica de la que hablo, comenzó en la Edad de Bronce, se remonta al siglo XII, y España no es el único país que la mantiene vigente, sino que también Portugal, sur de Francia y algunos países en América. En cambio, en España es la más característica, puesto que mi país es desgraciadamente representado, entre otras cosas, por la tauromaquia.
En primer lugar, quiero dirigirme a todas esas personas que están a favor de la tauromaquia pero que critican a los autitaurinos por comer carne.
Mmm... ¿Qué relación tiene una cosa con la otra? Es decir, conozco perfectamente las prácticas que se les realizan a algunos tipos de animales para conseguir una parte específica del cuerpo, lo cual me parece una atrocidad y estoy completamente en contra y jamás pienso comer ni ese animal, ni esa zona que se les ha sido explotada para el beneficio humano. Y aquí la cuestión, el beneficio humano.
El beneficio humano no tiene nada que ver con la subsistencia. El beneficio humano es lo que se consigue con la tauromaquia, con los animales que son tan dura e injustamente tratados para conseguir piel o una parte del cuerpo, veáse el pato, por ejemplo. El beneficio humano es totalmente innecesario con nuestra supervivencia, porque podemos vivir perfectamente sin foie, sin abrigos de piel de animal, y sin corridas de toros. ¿Por qué la raza humana es tan rastrera y tan ruin con animales que prácticamente nos dan la vida a nosotros y a nuestro ecosistema? Por capital, por espectáculo, por capricho. Ese es el precio que estamos dispuestos a pagar por lujos y prácticas que no tienen ninguna utilidad fuera del capitalismo. No es lo mismo matar por placer que matar para comer. Respeto a los omnívoros a pesar de que no soy una de ellos, pero los respeto, porque no hacen nada malo, no hacen nada más que su ciclo de vida, que es alimentarse. La forma de matarlos es la incorrecta y lo que aquí falla, y ese es el motivo por el cual he leído tantos comentarios de taurinos criticando a antitaurinos por no ser vegetarianos o veganos.

En segundo lugar, me reitero en lo que he comentado al principio. Esta práctica se remonta al siglo XII, y aún sigue vigente. Se considera tradición porque lleva nueve siglos realizándose, pero... Edad de Bronce y Edad Contemporánea, han pasado muchos siglos, han transcurrido dos periódos entre ellos, en los cuales han habido muchos avances tecnológicos, científicos, médicos, que nos han cambiado la vida y nos han ampliado la media de la misma. Se ha modificado el estilo de vida, se han creado derechos, se han conseguido méritos, se ha luchado para conseguir igualdad, han nacido grandes personas que nos han cambiado la forma de ver y entender el mundo, y también nos han brindado esplenderosas obras de arte que quedarán para la posteridad. Esto es lo que representa la evolución, ir evolucionando representa el cambio, representa el descubrimiento y mejoramiento de todo lo que logramos fabricar y comprender para obtener una vida mejor y brindársela a todos los que vivan después de nosotros. Todo cambia, todo evoluciona, lo que nos diferencia de los trogloditas es que nosotros, los homo sapiens sapiens, somos civilizados, tenemos el diálogo, la palabra y el conocimiento. En cambio, la tauromaquia borra por completo todo tipo de evolución humana durante todos estos siglos. Demuestra que seguimos siendo unas bestias que antiguamente torturaban a personas por placer o por robar una mísera migaja de pan y mataban animales con el propósito de conseguir espectáculo y diversión. Y sino, ¿qué explicación tiene seguir haciendo esto en pleno siglo XXI?
Somos suficientemente inteligentes para darnos cuenta de que esto no tiene ningún sentido, que es una tradición, pero una tradición cruel y frívola. Con el paso de los años, las crueldades se van convirtiendo en obsoletas, porque vamos aprendiendo y rectificando de nuestros errores y recordando el pasado para no volverlo a repetir.
"Los que no recuerdan el pasado están condenados a repetirlo".
¿Tan rápido lo hemos olvidado todo o simplemente queremos seguir comportándonos como cavernícolas?
El toro no decide estar dónde está, como muchos retrógrados creen. El toro no sabe por qué ni para qué está rodeado de personas y de una en concreto que quiere arrebatarle la vida de la manera más dolorosa y cruel posible. Bueno, "persona".
Y con todo esto no solo hago referencia a las corridas de toros, sino a todo tipo de prácticas que se le realice al toro y que sean perjudiciales para su estado físico y para su vida.

Podemos ver la diferencia entre tortura practicada en un toro y arte realizado con un toro:


 Acribillar, humillar, dañar y matar a un toro públicamente frente a cientos de "personas" que aplauden y confunden esto con arte, TORTURA.


 Mitología griega, Europa, donde Zeus, el dios supremo se transforma en un precioso toro blanco para raptar a Europa, ARTE.



 Jugar, degradar y quemar a un toro colocándole fuego en los cuernos hasta provocarle heridas irreversibles y en algunos casos la muerte, TORTURA. 



 Mitología griega, El Minotauro, una escena del famoso mito donde Pasífae, la mujer de Minos, reina de Creta, contrae relaciones sexuales con un toro hipnotizada por los poderes del dios Poseidón, castigo de la traición de Minos, ARTE. 


 Representación de la TORTURA mediante el ARTE.


Yo, como amante del arte y de la cultura, me parece una terrible atrocidad que esto se confunda con lo apreciado que tenemos en la vida. Artistas como Van Gogh, Botticelli, Miguel Ángel, Bosco, deben estar revolviéndose en su tumba. 
Aunque qué puedo esperar de un país que invierte 564.000.000€ al año a la tauromaquia mientras se recorta en educación y en investigaciones científicas que nos dan la evolución porque hay crisis y tienen que recortar para sacar dinero de alguna parte, y como siempre nos toca a los que queremos progresar. Pero claro, para retroceder y negarnos a progresar y evolucionar, para eso no hay crisis.